12 de octubre Día Mundial de la Artritis Reumatoide y de los Cuidados Paliativos
La Artritis Reumatoide es una enfermedad crónica que causa inflamación en las articulaciones, dolor, deformidades y dificultad de movimiento. Frecuentemente afecta a las manos y a los pies, pero también puede presentarse en otras partes del cuerpo.
El primer síntoma más común de la patología es la rigidez matinal en las articulaciones (especialmente en manos y pies), que produce dificultad en el movimiento. Además, el paciente también puede tener cansancio, fiebre, debilidad muscular o falta de apetito. La evolución de la enfermedad varía según la persona, ya que en algunos casos el avance de la patología se detiene, pero en otros se desarrolla durante toda la vida. En la actualidad, el tratamiento para esta enfermedad combina los medicamentos, la fisioterapia, el reposo y el ejercicio.
El origen de esta patología se desconoce. Dos de cada tres pacientes son mujeres y aparece en torno a los 50 años de edad, pero también existe un tipo poco frecuente que aparece antes de los 16 años; la Artritis Reumatoide Juvenil. En los casos más severos de esta variante de la enfermedad, pueden producir una destrucción de las membranas sinoviales (capa fina de tejido que recubre la parte interna de la cápsula articular) y, además, dar lugar a una alteración en el desarrollo, reducción de la movilidad y deformidades en las articulaciones afectadas durante la infancia o la juventud.
DIA DE LOS CUIDADOS PALIATIVOS
En realidad, la terapia de cuidados paliativos, comprende un amplio conjunto de tratamientos, que van desde el suministro de fármacos para aliviar el dolor físico del paciente, hasta tratamiento psicológico para él y su familia, trabajo social y un conjunto de actividades que le permita disfrutar de la mejor manera sus últimos momentos en este mundo, dadas las circunstancias.
Pero, ¿Qué son los cuidados paliativos?
Los cuidados paliativos no son nada novedoso. Surgieron durante la edad media, donde se intentaba dar cobijo y alivio al sufrimiento de los pacientes que parecían posteriormente debido al poco desarrollo en materia de salud y las condiciones sanitarias de la época.
Posteriormente, por el año 1967, aparecería en Londres el primer hospicio que aceptaría a personas con enfermedades terminales. Su propósito era el de brindar apoyo físico y psíquico, tanto a los pacientes como a sus familias para que pudiesen sobrellevar el duelo. Además, de realizar estudios para encontrar nuevos tratamientos que pudiesen alargar su tiempo de vida o curar esa enfermedad en el futuro.
Sin embargo, lo que hoy en día entendemos como un centro de cuidados paliativos no es lo mismo que un hospicio. En un centro de cuidados paliativos el tiempo de vida estimado para el paciente debe superar los 6 meses y también, debe existir una pequeñísima probabilidad de que la enfermedad remita. En cambio, un hospicio es un lugar en el que ya no hay vuelta atrás y solo se procura brindar la mejor atención al paciente y su núcleo familiar para que puedan aceptar la situación.
Los familiares también son tratados.
Los familiares también son tratados
¿Por qué celebrar un día para los cuidados paliativos?
El objetivo es culturizar a las personas sobre este tipo de tratamientos y ayudarles a sobrellevar de mejor manera este tipo de circunstancias. Los especialistas en cuidados paliativos centran su atención en brindarle al paciente terminal una nueva visión de su situación, una en la que pueden centrarse en todo lo bueno que sembró y en dar gracias a la vida, por haberles permitido disfrutar de ella así sea un breve momento.
Otra meta que tienen los especialistas es la de ayudar a las familias a prepararse para lo inevitable y poder sobrellevar de mejor manera la pérdida. Para ello someten a todo el grupo familiar a terapias psicológicas y de trabajo social, cerrando cualquier proceso emocional que guarde relación con el paciente.